lunes, 11 de junio de 2012

Ojalá pudiera...


Es increíble como hay veces que parece que no terminas de salir de una y te metes en otra, como, casi sin darte cuenta, se te suceden los problemas y las desgracias y parece que te ha mirado un tuerto y piensas ¿qué está pasando? ¿qué mierda de racha es esta? 

Pero qué impotencia más grande cuando esto mismo les pasa a las personas que quieres. Cuando ese alguien especial pasa por un bache, hay que ver lo que te gustaría poder hacer algo y simplemente te sientes estúpida, inútil y aunque sabes que no está en tu mano, que a veces la vida es así de dura, no puedes evitar sentir que tienes que hacer algo, que quieres hacer algo, pero que no puedes hacer NADA.

Me encantaría poder ayudarte, mi alguien especial, me encantaría poder compartir tus penas para que así tuvieras que soportarlas sólo por mitades, desearía que existiera un remedio para el pesar y una cura para las preocupaciones y los lamentos. Pero no los hay, o ni tú ni yo los conocemos. Vendrán tiempos mejores, por supuesto, y yo trataré de que éstos que ahora nos ha tocado vivir sean menos penosos en tanto que quieras pasarlos conmigo. Yo estaré aquí para escucharte, o sólo para acompañarte. Simplemente estaré aquí, esperándote. 

Esperándote con mis mejores abrazos, tendré los oídos bien atentos para aquello que me quieras contar y los ojos bien abiertos para aquello que me quieras mostrar. Estaré aquí para darte lo que necesites, aunque sé que lo que realmente quisieras no te lo puedo dar. 

Estaré aquí, sintiéndome impotente hasta la médula. Ojalá pudiera ayudarte.

Ojalá pudiera hacer más.

Ojalá pudiera...




1 comentario:

  1. En esto me siento muy identificada...impotencia suprema ante estas situaciones. Querer y no poder y sin que la intención cuente, porque hay cosas que no sólo se arreglan "con buenas intenciones".

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